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Desde hace más de quince años, los equipos de H&A acompañan a sus clientes en la gestión de sus parques de barricas. Desde una perspectiva de compromiso y reto medioambiental, hemos desarrollado una actividad dedicada al reciclaje de barricas de vino.
Con este fin, nuestros equipos se encargan de recoger y revender barricas al final de su ciclo de utilización.
El ciclo de vida de la barrica: desde la explotación vitivinícola hasta su llegada a nuestros almacenes
Para empezar, recibimos en nuestros almacenes las barricas que recogemos de nuestros clientes. Al realizar la descarga, nuestros equipos técnicos realizan una primera comprobación. El objetivo es tener una idea general del estado del barril para poder realizar una estimación del tiempo de trabajo necesario para cada uno.
Una vez completada esta primera etapa, los barriles se envían a la zona de limpieza. Nuestros técnicos proceden a limpiar y a desinfectar las barricas para evitar la proliferación de bacterias.
Cada año recogemos un promedio de 100 000 barricas en todos nuestros almacenes. Una vez limpias, las barricas se venden a empresas productoras de vino, bebidas espirituosas y cerveza.
¿Cómo se limpian las barricas de vino?
Para la limpieza de las barricas, nuestros técnicos practican una especie de reacondicionamiento tanto interno como externo. A nivel interno, utilizan agua a alta presión y realizan varios cambios de temperatura de caliente a frío.
Durante esta etapa, el objetivo es eliminar los cristales de tártaro que se hayan acumulado durante la crianza del vino. Además, esta acción permite liberar los poros de la madera.
El uso de vapor ayuda a eliminar las últimas impurezas que tenga la barrica. Esta etapa se realiza de manera suave y natural, no utilizamos productos químicos, ya que estos podrían afectar a la calidad de la madera.
Una vez finalizado el trabajo de limpieza, se deja que la barrica se escurra para eliminar el agua acumulada. A continuación, nuestros técnicos rocían azufre en el interior del barril. La utilización de este gas ayuda a evitar los olores o desviaciones que provocarían que la barrica no fuera adecuada para utilizarse de nuevo.
En general, se requieren entre 7 y 13 minutos para reacondicionar un barril, dependiendo del estado en el que llegue a nuestros almacenes.
Reciclaje de una barrica: las etapas siguientes
El reciclaje de un barril finaliza con el rociado de azufre. Sin embargo, dependiendo de las peticiones de nuestros clientes, podemos actuar en otros aspectos. Es en este momento cuando se realiza el reacondicionamiento externo.
Se puede devolver a la barrica un aspecto «nuevo» eliminando cualquier huella que haya dejado la crianza de vino. Para ello, nuestros equipos pulen el exterior de la barrica para eliminar las impurezas.
También podemos realizar operaciones de anillado de barriles.
Barricas de vino: el compromiso de H&A con un reciclaje de calidad
A lo largo del proceso de reciclaje, aplicamos nuestra carta de calidad. Esta incluye una supervisión técnica para una mejor valorización de las barricas. Trabajamos con laboratorios y enólogos reconocidos para garantizar una calidad irreprochable.
Todos estos elementos nos permiten ofrecer a nuestros clientes barricas de segunda mano frescas, saludables y en buen estado.
Las barricas que reciclamos se enmarcan en un compromiso responsable y disponen de la etiqueta «Garantía de Reciclaje de Barricas». Nos comprometemos a prolongar la vida útil de las barricas.
La garantía de reciclaje de H&A se define en 4 ciclos:
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